Aunque un tropezón no sea caída, la "Contribución estudiantil" y el símbolo de la privatización siguen retrocediendo. L@s compañer@s de a.i.e.l., en la sesión del 2 de julio, cuestionamos fuertemente en el Honorable Consejo Directivo de nuestra Facultad las bases sobre las que se asienta el arancel en la universidad pública.
La verdad es que estamos orgullos@s de haber encontrado en el Consejo Directivo el espacio para plantear nuestra posición sobre la temática de la gratuidad. Luego de mucho tiempo, encontramos una instancia interclaustro (con docentes, egresad@s y no docentes) para decir:
- Que defendemos la universidad pública y gratuita, y actuamos en consecuencia.
- Que no somos l@s estudiantes quienes debemos pagar por la educación, sino que es el Estado quien debe garantizarnos este derecho.
- Que los mecanismos que se deben utilizar para recaudar dinero no son aranceles a l@s estudiantes, sino impuestos que se correspondan con el nivel de ingresos de la población y que sean democráticamente distribuidos.
- Que la educación debe ser gratuita e igualitaria y por eso, no sólo NO se debe cobrar el acceso a ella, sino que se deben generar mecanismos tales como becas y subsidios para colaborar con el ingreso de nuev@s compañer@s, que hoy, por razones económicas, no pueden acceder.
- Que es ilegítimo que el dinero aportado por l@s estudiantes sea administrado por personas ajenas a nosotr@s y de manera poco clara (jamás vimos un balance de la Cooperadora).
- Que una "Contribución" no puede ser obligatoria.
- Que la implementación de un arancel no remedia los problemas de la educación en la universidad ni en ningún otro nivel.
- Que ser solidario no es pagar $30 por mes.
- Que la Universidad no presta servicios, y por tanto l@s estudiantes no somos clientes.
- Que la tarea de la comunidad universitaria es movilizarse y organizarse para que el presupuesto universitario no sea irrisorio y para que se ejecute mejor.
Aquella mañana de julio, el debate fue muy interesante y generó la sensación de que detrás de esta discusión había otras que también merecían ser resueltas, si de verdad buscamos construir una universidad libre y pública. L@s docentes respetaron y escucharon nuestras voces, l@s egresad@s y no docentes también acompañaron nuestra propuesta y finalmente tod@s los Consejer@s –menos las dos de la agrupación William Shakespeare y la de la agrupación Franja Morada, quienes faltaron al Consejo, como ya nos tienen acostumbrad@s– votamos a favor de retirar el carácter de obligatoriedad de la actual "Contribución estudiantil".
Para nosotr@s significó, luego de casi 10 años de lucha, un paso muy importante. Por primera vez desde los '90, l@s estudiantes de nuestra Facultad no están obligados a pagar la "Contribución" y aquell@s que sí deseen hacerlo, deberán solicitarlo.
Este comunicado tiene la alegría de llevar una noticia de libertad. Sabemos que nuestra lucha es la lucha de much@s que con nosotr@s buscan una universidad solidaria en el día a día. Solidaria porque contiene a sus estudiantes, porque les provee herramientas para su liberación y para la transformación social. Por medio de este texto queríamos hacer extensivo este logro con quienes comparten nuestro camino y nuestro proyecto. Con estas palabras queríamos invitar al debate acerca de qué es la universidad pública, porque no creemos ser dueños de una verdad irrefutable, sino que por el contrario, sentimos que nuestras ganas y entrega por una universidad nueva son también las ganas de much@s de ustedes.
